El paso del tiempo y la oficina de Gus Orozco

Estando en la oficina de Gustavo Orozco, charlabamos acerca de tantas y tantas cosas, sin embargo note que en su kilométrico escritorio habia un objeto nuevo, era una maceta exquisita, con un colorido agradabilísimo y un planta majestuosa, una especie de magueyito (el me dio el nombre por supuesto) y en la parte superior una flor rosa mexicano brotando con mucha dificultad en un parto muy lento, abrazada por las delicadas puntas nuevas. En la mesa lateral junto a su ventanal, tiene otras macetitas con flores hermosas, una de ellas con rosas matizadas minusculas que dan un colorido increíble, junto a ésta. otra planta con tres difrentes alturas y con otro nombre exótico.
Estaba admirando sus plantas cuando Gus se levanta y me dice, mira Raul con estos tiempos tan acelerados y el estres tan a flor de piel, cuando siento alguna inquietud me levanto, tomo el rociador de agua y me acerco a cada una de las plantas y les rocío cuidadosamente el agua para refrescarlas y hacer lo mismo con mi mente, me siento con un aire renovado y de una manera apacible.... guardé silencio, nos vimos a los ojos y le dije:

Estas envejeciendo Gus....

Seguimos comentando cuestiones profesionales y mundanas cuando de pronto se queda quieto y dice en tono de reflexión...

¿Estoy envejeciendo?........¡p.... Raul.!

Pues si , estamos envejeciendo, pero esos momentos de agradable conversación y reflexión hacen que podamos valorar lo que a través de los años hemos logrado.

Un saludo afectuoso a mi amigo y compañero Gustavo Orozco.

Raul Becerra